Un año más se abrieron en mi casa estas grandes flores amarillas.
Las fotos son de flores de dos ejemplares diferentes, uno ya veterano y otro recién incorporado este año.
Sin lugar a dudas el Echinocereus subidermis se ha convertido en un de esos clásicos que prevalecen en mi modesta colección.
Hola Antonio maravillosas las flores me enamore de ellas , que belleza y las fotos muy bonitas, un abrazo.
ResponderEliminarrealmente hermosas flores!!!!grandes y vistosas!!!!diera la impresion que fueran diferentes amarillos!!el cactus es precioso,tambien!!cariños monica
ResponderEliminarHola Marisol. Esta especie fué la primera del género echinocereus que entró en mi casa, el cactus en sí me gusta pero las flores fueron el argumento de mayor peso para que el subidermis se convirtiese en una planta de vanguardia entre mi pequeño oasis pinchudo. Me alegra que te gusten. Salu2.
ResponderEliminarHola Mónica. No sé si realmente tenía amarillos diferentes, creo que no, más bien debe ser un efecto de las diferentes intensidades de luz que había en el momento de las fotos. Por cierto, ya van en camino las semillas. Un saludo compañera.
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